domingo, 29 de noviembre de 2015

Primero, su seguridad. Después, su felicidad, su sonrisa. En tercer lugar, ella en su totalidad. Después de esto, allí voy yo. Esas son mis cuatro grandes preocupaciones, pero si las primeras tres no se cumplen, la cuarta no tiene sentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario